Monday, September 18, 2006

¿Circo legislativo?

Estando a dos dias de cumplir dos meses de instalado el nuevo congreso, todos tenemos una serie de dudas que ojalá alguien nos pueda responder.

Y es que parece ser, que el congreso en vez de dedicarse a legislar, proponer, fiscalizar, administrar y/o juzgar, ha hecho todo menos eso. Hemos sido testigos de grandes disputas burocráticas, de deslealtades, de alianzas y guerras entre partidos. Para colmo de males, ya escuchamos comentarios de reforma de la nueva ley de bancadas, y comentarios de destacados senadores renegando de su seguridad y de sus garantías.

Todo lo anterior, nos dice solo una cosa... La famosa coalición Uribista no es más que un montaje de los mismos politiqueros de siempre, lista para buscar puestos como aves de rapiña en donde se pueda y como se pueda. La famosa aplanadora Uribista, que suponía una parcial unidad ideológica, y por ende una mayor rapidez a la hora de adelantar proyectos, se redujo a un simple sueño del ejecutivo, que parece ser el único honesto en las ramas del poder. ¿Por qué?

Los colombianos seguimos aprendiendo a elegir. Nos falta aún muchos golpes para poder aprender a diferenciar entre politiqueros y políticos. Hoy en día el 90% de nuestro congreso está compuesto por los mismos politiqueros, corruptos de siempre. La única diferencia es que antes se hacian llamar liberales, y hoy se hacen llamar de la "U", Cambio Radical, Alas Equipo Colombia o Polo Democrático Alternativo.

En cuanto al Partido Liberal, vemos que para efectos de rentabilidad, los liberales pensaron que les era más rentable darse una imagen de oposición, cosa que no les salió muy bien. A causa de esa figura de oposición, los oportunistas, fueron más inteligentes y decidieron volverse Partidos Uribistas "fuertes", y ahi los tenemos: Una partida de lagartos sin conviccion alguna, que ante la perdida de popularidad del presidente, ya veremos que se volverán magicamente de la oposición al gobierno.

He ahi a nuestro sabio legislador, siempre en miras del bien común y del bienestar del pueblo colombiano. El presidente Uribe que parecía estar acompañado, está más solo que nunca; todo por confiar en un legislativo que resultó ser de los más incompetentes, y por creer en quienes no tienen esperanza alguna de rehabilitación política.

La situación cada vez se pone peor, y los oportunistas cada vez se dejan ver más. ¿Y pensamos en un sistema parlamentario?

Juan Pablo Quintero